Lapislázuliz

Palabras en el aire que buscan ser respiradas.



Cuando el día empieza húmedo, como hoy,
recuerdo tu calor nocturno
calor de amor, de protección
de conversar largas horas en la habitación
sin sentir que el día pasa, que tiene fin.

Enredada en tus palabras
no confundida, sí enamorada
rendida al sentimiento que se expresa en un suspiro
aunque ni lo ves, pero que existe en el fondo
¿pensado? mucho. Terminado en el olvido.

Mi juventud te vive a su forma
me palpitas en más de una canción en los oídos
y yo, huyéndote, no espantándote, de mi corazón
queriéndote tanto y teniendo que olvidar
quemando cenizas de ese cigarro compartido.

Me canto, me arrullo con el sonido del mundo
converso con mis manos a media lengua
las miro, tienen pedazos de tu piel
mientras cerco mis rodillas que se besan con el viento
mientras te espero con la cara en la almohada.

Sigo escondiendo las sonrisas para mañana
pero actualizando al día mis sensaciones
tratando de no encadenarte a mi memoria
aunque sea inútil escapar de las emociones
de esas que crecen no sólo en la piel, que van más allá.

Si fuera tan fácil dejar de sentir
si vieras que no quiero que sanes mis heridas
sino más bien que compartamos alegrías
es risible mi situación, lo sé, lo sé más de una vez
cuando me miro en el espejo de ese hotel.

De nada valen las canciones románticas
ni los recuerdos de madera con olor a barniz
ni las historias de viajes fantásticos, total...
siempre me despido de ti con ganas locas de abrazarte
de quedarme dormida besando tu nariz.

2 comentarios:

Interesante poesía.
Persevera.

Saluditos...

Gracias por la visita =)